Cuando nos iniciamos en el cultivo de interior de la marihuana, nos asaltan muchas dudas, una de ellas es ¿qué tipo de bombilla es la mejor que puedo utilizar?
En realidad más que la mejor, lo que debemos plantearnos es ¿cual es la más adecuada para el tipo de cultivo que vamos a desarrollar.
A continuación os detallo los tipos de bombillas que podréis encontrar en el mercado y para qué son adecuadas.BOMBILLAS DE ALTA PRESION DE SODIO (HPS)
Emiten una luz muy semejante a la del sol. Por su intensidad, brillo, proporción de lúmenes por vatio y espectro son las más adecuadas para el cultivo de cannabis.
Las puedes encontrar en 4 vatajes estándar: 250w, 400w, 600w y 1.000w. Las dos primeras son las más adecuadas para espacios pequeños (armarios de menos de un metro cuadrado), las de 600w son las más utilizadas, ya que son ideales para armarios de 1 ó 1,2 metros² y las de 1000w, se utilizan para superficies superiores al 1,2m².
Si tu cuarto de cultivo tiene una superficie mayor que 1,2m², te aconsejamos que uses antes una combinación de bombillas de 400 y/o 600w, que una bombilla de 1.000w. La razones de nuestro consejo son varias: las bombillas de 1000w son proporcionalmente mucho más caras que, por ejemplo, dos bombillas de 600w; la luz se distribuye mejor con dos bombillas que con una sola y además, en caso de que una bombilla te fallara, siempre queda la otra que mantendrá tu cultivo iluminado mientras que reaccionas y cambias la bombilla averiada.
No olvides las bombillas de alta presión de sodio, necesitan estar conectadas siempre a un balastro o reactancia para poder arrancar. El balastro debe ser siempre de la misma potencia que la bombilla. (no debes conectar, por ejemplo una bombilla de 400w aun balastro de 250w o viceversa).
Las bombillas de alta presión de sodio pueden ser utilizadas tanto en la fase de crecimiento de nuestras plantas como en la de floración, el principal motivo es que en crecimiento las plantas no necesitan tanta energía como en floración para la creación de flores.
BOMBILLAS DE HALOGENURO METÁLICO. (HM)
Al igual que las anteriores, su espectro se asemeja a la luz solar. La diferencia es que emiten una luz mucho más blanca, por lo que son las más apropiadas para la fase de crecimiento de nuestras plantas ya que imitan el color de la luz de primavera. También son las ideales para el mantenimiento de plantas madre.
Las puedes encontrar en varios vatajes: 250w, 400w, 600w y 1.000w.
Muchos cultivadores se preguntan si realmente vale la pena tener dos bombillas para sus cultivos. Una de alta presión de sodio para la etapa de floración y otra de halogenuro metálico para la fase de crecimiento. Mi respuesta es que depende del nivel de exigencia que te marques. Realizar todo el cultivo con una HPS es más que factible. El rendimiento de tu cosecha será óptimo. Sin embargo, si quieres rozar la perfección, deberás cultivar en la fase de crecimeinto con HM y en la de floración con HPS. Con esto conseguirás que tus plantas desarrollen un crecimiento más adecuado.
No olvides que las lámpara de HM, también necesitan balastro de su misma potencia.
FLUORESCENTES
Este tipo de “bombilla” sólo es adecuado para cultivo de esquejes o plántulas provenientes de semilla en sus dos primeras semanas de vida. Su utilización durante todo el cultivo produce cogollos poco densos y de baja calidad.
Compra fluorescentes de “luz fría”, es decir muy blanca, porque serán los mejores para que tus clones y plántulas crezcan en perfectas condiciones.
La ventaja de este tipo de lámpara es que se pueden acercar mucho a la planta sin quemarla, de forma que el crecimiento no se espiga y se consiguen plantas densas, con distancias internodales cortas.
Los vatajes de los tubos fluorescentes son múltiples. El uso que se les dá a estas lámparas no requiere grandes vatajes, por lo que puedes adquirir tubos fluorescentes de bajo vataje (18w, por ejemplo) para cada uno de tus propagadores de 60cm x 25cm. Si quieres colocar más cantidad de clones o plántulas aumenta el vataje o el nº de lámparas.
BOMBILLAS DE BAJO CONSUMO ó LAMPARAS FLUORESCENTES COMPACTAS (CFL)
Son las más recientes en el mercado.
Su principal ventaja es el ahorro en la factura de la electricidad.
Según su espectro lumínico o kelvins, están disponibles para propagación, crecimiento y floración. Así las CFL de propagación tienen 14.000 kelvin. Las CFL de crecimiento rondan los
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